¿Cómo potenciar la creatividad en primera infancia?
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URI: http://hdl.handle.net/10818/50877Compartir
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Duarte Suarez, Jennifer LizethAsesor/es
Baquero, Ángela MarcelaFecha
05/01/2022Resumen
El mundo entero está gobernado por ideas creativas. La creatividad le permite a una persona pensar más allá de lo imaginable y permite entrar en un mundo de ideas
creativas. Cuando vemos un pequeño trozo de arcilla sobre la mesa, es posible que no hagamos mucho con él, pero cuando un niño pequeño lo ve sobre la mesa, está
obligado a recogerlo, darle alguna forma de acuerdo con sus ideas creativas, darle vida y transformarlo en alguna otra forma. Entonces, ¿cuál es el trabajo de la
creatividad aquí?
La creatividad es aquella herramienta que puede convertir o transformar una determinada cosa en una o muchas otras formas, dependiendo de la capacidad
imaginativa. Además, la creatividad no es medible, no es un recurso tangible, es más una mezcla compleja de pensamiento imaginativo combinado con ideas que se
fusionan para salir de la mente del creador, guiándolo a realizar acciones basadas en el proceso de pensamiento creativo que acaba de surgir en su mente.
Esta comienza con una base de conocimiento, aprendiendo una disciplina y dominando una forma de pensar, se puede aprender a ser creativo experimentando,
explorando, cuestionando suposiciones, usando la imaginación y sintetizando información. (Ruth Daniela Izquierdo, 2018)
Es importante resaltar que, la creatividad es la forma más libre de autoexpresión, no hay nada más satisfactorio y gratificante para los niños que poder expresarse
abiertamente y sin juzgar. La capacidad de ser creativo, de crear algo a partir de sentimientos y experiencias personales, puede reflejar y nutrir la salud emocional de
los niños. Las experiencias que tienen los niños durante sus primeros años de vida pueden potenciar el desarrollo de su creatividad, las experiencias creativas pueden
ayudar a los niños a expresar y afrontar sus sentimientos, la actividad creativa de un niño puede ayudar a los adultos a aprender y entender más sobre lo que el niño
puede estar pensando o sintiendo. La creatividad también fomenta el crecimiento mental en los niños al brindar oportunidades para probar nuevas ideas y nuevas
formas de pensar y resolver problemas.
Los adultos tienen un rol de gran importancia en cuanto a potenciar y no inhibir el desarrollo de la creatividad en los niños, así como brindar ciertas condiciones para
crear un clima adecuado en el cual el niño sea capaz de mantener activa esta capacidad. (Madi, 2012)
Los adultos, en especial los padres de familia deben enseñarles a los niños a no tener miedo a equivocarse, para ello la forma de enseñar debe ser menos instructiva y
más socializadora. Se debe fomentar que todos descubramos nuestro talento y podamos cultivarlo para que nuestra vida sea lo más plena y armoniosa posible.
Si lo que pretendemos es que nuestros alumnos/as tengan un pensamiento crítico, es imprescindible que fomentemos en nuestras escuelas el desarrollo de la creatividad
y la imaginación y no hay que cortar esto en nuestros niños/as para que de adultos sigamos tomando decisiones con un espíritu crítico, debemos enseñarles a lanzar
hipótesis, a probar cosas, a explorar todas las posibilidades, hacer juicios sobre los resultados, para que así sean creativos y al mismo tiempo críticos. Crear mentes
abiertas es el camino que debe seguir la educación. Debemos fomentar la creatividad en la infancia si queremos que nuestros hijos/as y alumnos/as sean adultos capaces
de enfrentase a situaciones y responder ante ellas con eficacia; si queremos que tengan ideas originales que logren cambiar el mundo.