“With a little help from the people”: Actio popularis and the politics of judicial review of constitutional amendments in Colombia 1955–90

Abstract

This article examines the reasons behind the consolidation of the Supreme Court of Colombia’s authority during the second half of the twentieth century as the ultimate umpire of amendments’ constitutionality. After analyzing the case law of the Supreme Court between 1955 and 1990 and the political environment in which it rendered its decisions, the article claims that the Court managed to cement its power to review amendments thanks to the presence of a novel constitutional experiment, as well as to the existence of certain political conditions. With respect to the first factor, an actio popularis (by which any citizen had the right to petition the Court and challenge the constitutionality of legislation) granted the Supreme Court a constant flow of cases that allowed it to entertain and adjudicate on citizens’ petitions questioning the constitutionality of amendments. Regarding the latter factor, democracy and political pluralism gave the Court some room to quietly consolidate its jurisdiction to review amendments and, eventually, quash some of them. The article concludes with a cautionary note on the success of actio popularis and the doctrine of unconstitutional constitutional amendments as deployed by the Supreme Court.

Este artículo examina las razones detrás de la consolidación de la autoridad de la Corte Suprema de Justicia de Colombia durante la segunda mitad del siglo XX como el máximo árbitro de la constitucionalidad de las reformas. Luego de analizar la jurisprudencia de la Corte Suprema entre 1955 y 1990 y el ambiente político en el que dictó sus decisiones, el artículo sostiene que la Corte logró cimentar su poder de revisión de reformas gracias a la presencia de un novedoso experimento constitucional, así como en cuanto a la existencia de ciertas condiciones políticas. Con respecto al primer factor, una actio popularis(por el cual cualquier ciudadano tenía derecho a presentar una petición ante la Corte e impugnar la constitucionalidad de la legislación) otorgó a la Corte Suprema un flujo constante de casos que le permitieron conocer y fallar sobre las peticiones de los ciudadanos que cuestionaban la constitucionalidad de las enmiendas. Con respecto a este último factor, la democracia y el pluralismo político le dieron a la Corte cierto espacio para consolidar tranquilamente su jurisdicción para revisar las enmiendas y, eventualmente, anular algunas de ellas. El artículo concluye con una nota de advertencia sobre el éxito de la actio popularis y la doctrina de las reformas constitucionales inconstitucionales desplegadas por la Corte Suprema.