El suicidio asistido por el médico
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URI: http://hdl.handle.net/10818/13900Visitar enlace: http://personaybioetica.unisab ...
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Regazzoni, Carlos JavierFecha
2000Resumen
Euthanasia is not only a medical issue. lt has been approved by many countries and has certain public acceptance. Its use predominates among cancer and depressed patients, and has been extended to children and psychiatric patients without compliance of minimum legal requirements. Autonomy of the individual and suicide as the ultimate remedy to hopeless pain, are the arguments for approval of euthanasia. lnvoked by ideological viewpoints, euthanasia is a boast of autonomy, which averts media practice. Pain care is inaccurate due to ignorance. Palliative care medicine offers adequate human alternatives for patients and relatives.The core question relating this matter is why suffering? Love and care are the only answers to pain. Clinical research data link poverty, loneliness, depression and suicide. Commercial purposes are in stake, and if dignity of life of one individual is ignored, the whole humankind is in danger of being subject of relativism. Physician I; should treat mind as carefully as body to give a better care to terminally ill patients, without economical or social pressures, which avert the real meaning of life. El tema de la eutanasia no es solo médico; su aprobación es un hecho en algunos sitios, y encuentra cierta aceptación pública; predomina en pacientes con cáncer y deprimidos. Frecuentemente no se cumplen los requisitos legales mínimos y su uso se extiende a niños y enfermos psiquiátricos. Los argumentos para legalizar la eutanasia son: la autonomía del individuo y el suicidio como último remedio ante el dolor. La eutanasia es un alarde de autonomía, pero desvía la misión del médico y se defiende por cuestiones ideológicas. Lo segundo es médicamente incorrecto; el manejo del dolor es inadecuado por desconocimiento, y la medicina de cuidados paliativos propone alternativas más humanas. La pregunta de fondo es: ¿Para qué sufrir? Ante el que sufre, la respuesta debe ser el amor. Datos experimentales vinculan pobreza, soledad, desempleo, depresión y suicidio. Hay intereses comerciales, y si se relativiza la dignidad de una vida, se relativiza la de todas.En el paciente terminal, el médico debería tratar el alma junto con el cuerpo; nuestras decisiones son cada vez más tecnológicas y menos humanas, y responden a cánones administrativos y no existenciales, con la consecuente deshumanización.
Ubicación
Persona y Bioética; No 11-12 (2000)