@misc{10818/51016, year = {2022}, month = {2}, url = {http://hdl.handle.net/10818/51016}, abstract = {Parménides anunció la condición del ser como algo que es y del no-ser como algo que no es, bajo su sentencia: “Jamás se probará esto: que las cosas que no son, son; pero tú, en tu indagación, aparta tu camino de este pensamiento” (Fr. 7, Dk; Kirl 1997). Parece desde aquí un anuncio de que en aquello negativo no es posible decirse o pensarse algo porque simplemente no es. No es hasta que Platón, en su gran diálogo Sofista, abre la posibilidad de pensar y hablar del no-ser porque cabe la posibilidad de caer en la falsedad sin siquiera prevenirlo en el discurso del sofista, quien se escuda bajo la premisa parmenidea. Así estas dos grandes referencias filosóficas han tejido el camino de comprensión del no-ser en el pensamiento occidental, esto es, el no-ser es simplemente contrario al ser y, si bien puede hablarse o pensarse de este, no es posible que sea por lo que es mera nada: es así lo contrario a lo que es, al ente. Así queda determinado aquello que es negativo.}, publisher = {Universidad de La Sabana}, title = {Entre la conciliación dialéctica y la huella aporética : (Des)ajustes respecto de lo negativo en Hegel y Derrida}, author = {Moreno Rojas, Jimmy Esteban}, }